La Protectora de Plasencia recupera otro perro salvajemente maltratado

Le hicieron cortes en los genitales y perforaciones con un punzón. La agresión tuvo lugar en Guijo de Galisteo, donde había sido abandonado

La sangre tiñó de rojo el pelo blanco de Ator hace sólo unos días. Este precioso samoyedo blanco ha sido víctima de una de las agresiones más salvajes que pueden caber en cabeza humana. Alguien le clavó un objeto punzante, que pudo ser un destornillador, por distintas partes del cuerpo. Y como no tuvo suficiente con este ensañamiento, se dedicó también a hacerle cortes por la zona genital, así como en la ingle y cara interna del muslo. A la vista de las heridas, una hoz pudo ser la herramienta utilizada.

A pesar de su gravedad, el animal ha tenido fuerza suficiente para sobrevivir por las calles de Guijo de Galisteo donde le habían abandonado hace un mes y donde también ha tenido lugar la agresión. Unos vecinos le han venido atendiendo durante su callejeo, dándole agua y comida. Fueron ellos los que avisaron a la Protectora de Animales de Plasencia y Comarcas cuando le descubrieron maltrecho. Los responsables de la asociación intentaron ponerse en contacto con el Ayuntamiento, pero ante la falta de respuesta, decidieron acercarse hasta la localidad para localizarle e intentar devolverle la vida.

Ya tiene adoptante

El perro, de cuatro años, llegó a la Clínica 'Selva' el jueves de la semana pasada. La veterinaria Maribel Fernández, se dio rápidamente cuenta de la gravedad del daño. Tanto, que en una semana han tenido que operarle dos veces. «Cuando vino le suturamos, pero tenía una gran infección y algunas de las heridas se le han abierto. Le hemos tenido que quitar tejido necrótico y ahora estamos esperando a que cicatrice por segunda intención».
Le hicieron cortes en los genitales y perforaciones con un punzón La agresión tuvo lugar en Guijo de Galisteo, donde había sido abandonado

Ator está enganchado al dispensador de suero y tendrá que permanecer al menos un mes hospitalizado. Ayer fue la primera vez que comió. El animal está haciendo un esfuerzo encomiable por mantenerse vivo. «Es muy animoso y tiene un carácter excepcional», señala Salud Mateos, presidenta de la Protectora.

Seguramente, a más de un lector le habrán entrado ganas de llevarse a Ator a casa, en cuanto ha visto la foto. Más todavía cuando ha conocido su triste historia. Pues no será posible, porque la suerte ha querido que ya le haya salido un adoptante. Una periodista de Mérida que ha viajado a Plasencia para conocer y contar su historia.

Quien sigue esperando que le lleven a casa es 'León', el perro mestizo que la Protectora recuperó a principios de enero en Valcorchero. Le dieron aviso desde la Sociedad de Cazadores, que le descubrió vagando con un cepo mutilándole una pata. Se la han tenido que cortar, pero está feliz y contento, terminando de recuperarse, en las perreras de la finca municipal 'Capote'.

Hoy, 01/02/2008